SAN JUAN, Puerto Rico (AP) — Es hora de decir adiós.

Siete leones, un oso, un camello e incluso un puercoespín abandonaron el viernes el solitario zoológico de Puerto Rico para dirigirse a un nuevo hogar en Colorado.

Un grupo de rescate de animales con sede en Estados Unidos comenzó a transferir a los animales bajo un plan para encontrar mejores lugares para los animales que el zoológico de la isla, donde varias especies han muerto.

Los empleados del zoológico y los trabajadores de la organización Wild Animal Sanctuary prepararon a los grandes felinos y a los demás animales para el largo viaje.

Los activistas han responsabilizado durante mucho tiempo al gobierno puertorriqueño por las muertes y la mala salud de los animales reportadas durante más de una década en el zoológico de la ciudad occidental de Mayagüez.

Wild Animal Sanctuary está supervisando la eliminación de los animales y otras criaturas en el zoológico. Serán trasladados inicialmente a un refugio en Colorado hasta que se les encuentre un hogar permanente.

ARCHIVO – En esta fotografía de archivo del 7 de julio de 2017, un mono observa desde su recinto en el Zoológico Dr. Juan A. Rivero en Mayagüez, Puerto Rico. (Foto AP/Danica Coto, archivo)

Algunos de los ejemplares más pequeños como los reptiles y algunos monos ya fueron trasladados, pero los mamíferos más grandes como los leones, el oso y el camello requirieron medidas especiales para viajar.

Un comité designado por el gobierno dijo que en la última década dos pumas murieron en el zoológico. También expresó su preocupación por un chimpancé con bajo peso, así como por un rinoceronte llamado Felipe que cojeaba y dijo que faltaba refugio para los animales.

En enero, una osa negra estadounidense llamada Nina que había dejado de comer murió de un infarto cuando tenía más de 20 años. Los osos negros pueden vivir hasta 35 años en cautiverio.

En marzo, las autoridades federales dijeron que abandonarían todas las investigaciones sobre el zoológico después de llegar a un acuerdo con las autoridades locales para trasladar a los animales a santuarios en Estados Unidos continental. El anuncio enfureció a muchos activistas.

El zoológico abrió originalmente en 1954, pero ha estado cerrado desde que los huracanes Irma y María azotaron a Puerto Rico en septiembre de 2017.