TAMPA, Fla. (WFLA) – Michael Keetley, un exconductor de un camión de helados acusado de matar a los hermanos Juan y Sergio Guitron y herir a otros cuatro el Día de Acción de Gracias en 2010, fue declarado culpable de todos los cargos por un jurado el martes por la mañana.
Los miembros del jurado comenzaron a deliberar a las 4:00 p.m. del viernes, tomaron un descanso de una hora y luego deliberaron hasta las 9:00 p.m. del viernes por la noche antes de irse a casa para el fin de semana.
Los miembros del jurado recibieron instrucciones de no hablar con nadie sobre el juicio durante el fin de semana. Luego regresaron a la corte a las 8:30 a.m. del lunes para comenzar las deliberaciones a las 8:30 a.m.
Keetley había sido juzgado por el asesinato antes, pero un jurado anterior no pudo llegar a un veredicto.
La fiscal estatal adjunta Michelle Doherty dijo al jurado durante sus alegatos finales que Keetley mató por venganza.
“Comenzó a dispararles uno por uno”, dijo Doherty. “Estaban desarmados, hicieron lo que él quería y les disparó de todos modos”.
La defensa sostiene que los hombres que recibieron los disparos identificaron al hombre equivocado y que la Oficina del Sheriff del Condado de Hillsborough cometió muchos errores durante su investigación.
“La investigación que siguió fue nada menos que una pesadilla en sí misma”, dijo el abogado defensor Richard Escobar.
El asesinato ocurrió el Día de Acción de Gracias de 2010.
Un juicio anterior en el caso terminó cuando el jurado no pudo llegar a un veredicto.
Los hermanos Juan y Sergio Guitron, más conocidos como “Magic” y “Spider”, murieron en su casa en Ocean Mist Court en Ruskin.
Otros cuatro hombres resultaron heridos pero sobrevivieron.
Los fiscales dijeron que Keetley en realidad quería matar a un hombre que conocía como “Creeper” y pensó que ese hombre estaba en el grupo la noche del tiroteo.
Los fiscales dijeron que Keetley buscaba venganza la noche del tiroteo porque le habían robado y disparado mientras conducía su camión de helados.
El estado dijo que Keetley luego se obsesionó con encontrar al hombre que le disparó y realizó su propia investigación y luego disparó a los hombres que creía que eran los responsables.
