TAMPA, Fla. (WFLA) – Hace una semana Alejandra Rodríguez llegaba de la mano de su padre a Tampa, proveniente de Cuba, después de dos años de lucha y del apoyo del equipo de Noticias Tampa Hoy para agilizar un proceso migratorio que parecía haberse detenido. “No me lo creo aún, es que estoy todavía en una… No sé. Tengo tanta emoción por dentro, vladimir ¡que no sé!” Afirmó Alejandra al salir de la terminal aérea.

Pero hoy esta familia cubana no tuvo que cargar pasaportes ni visas para llegar a su próximo destino, nuestro Centro de Noticias Tampa Hoy, queriendo celebrar con nosotros después de tantos meses de espera.

Francis Rodríguez, el padre de Alejandra, recordó todos estos meses de arduo trabajo. “Lo contacté tocando puertas. A medida que fue pasando el tiempo ya ustedes no son un programa de televisión, o una institución. Ustedes son mi familia, mis amigos que me ayudaron a que se acabara el sufrimiento de un padre y poder traer a mi hija aquí, yo no lo veo de otra forma”.

Ya aliviado, Francis nos contó lo que sintió el día después de traer a su hija a Tampa. “Me levanté por la mañana, sobresaltado. Y fui corriendo a donde estaban ellos y una vez más, una gran alegría de que era real todo lo que se estaba viviendo”.

Una alegría que también siente la pequeña de apenas 16 años. “Muy feliz de estar con ellos, ellos lo saben”.

Pero en medio de nuestra conversación, sobrevino la memoria de su madre y de su abuela, quienes murieron cuando ella apenas tenía 14 años. “Es como que… uno no vuelve a ser el mismo”.

Alejandra, quien vio hoy por primera vez en su vida un canal de televisión, dice que ahora sí puede soñar. “Lo primero que quiero ser es veterinaria y yo sé que se me va a dar” (…) “fíjate que ya estoy loca por empezar la escuela, por empezar a hablar inglés, poder adelantarme”.

Con la voluntad intacta, a pesar de todo lo que le tocó vivir. “Si con todo lo que me pasó pude, esto es algo más. Algo más ¡así que voy a poder con esto!”. Dijo Alejandra.

Francis nos comentó que aunque el año escolar está a punto de terminar, intentará inscribir a la niña para que su proceso de adaptación a las aulas de clases de la Bahía se de lo antes posible.