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MIAMI, Florida (WFLA / NBC) – Rosa Felipe, una amada trabajadora de la salud en el Jackson Memorial Hospital, enfrenta la posibilidad de perder las manos después de una batalla de casi cinco meses con el coronavirus.
Felipe fue una de las primeras personas en ser diagnosticadas con el virus el 9 de marzo. Ella dice que su trabajo en electroencefalografía en el hospital la puso en gran riesgo.
“Mi trabajo es ser el técnico de EEG, corro por todas partes traumatismos incluidos y hago EEG en pacientes vulnerables”, dijo Felipe.
Sus pacientes necesitaban pruebas de actividad cerebral inmediatas, sin dejar tiempo para evaluar a los pacientes. “No tienes tiempo para saber cuándo estás tratando de salvar una vida”, dice Felipe.
A pesar de las condiciones médicas subyacentes, la familia de la madre de dos dice que está ganando la batalla con COVID-19, pero que puede perder las manos debido a complicaciones del tratamiento.
El Jackson Memorial Hospital reconoció el trabajo de Felipe y emitió una declaración que dice en parte:
Jackson Health System siente una profunda gratitud hacia Rosa Felipe y todos los demás trabajadores de atención médica de primera línea que se han enfermado mientras luchan contra este virus impredecible.
Sistema de salud de Jackson
La pregunta ahora es cuándo será dada de alta Rosa. Su familia dice que quieren que se recupere por completo antes de que eso suceda.
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