Corea del Norte disparó el lunes dos misiles balísticos de corto alcance al Océano Pacífico, y la hermana del líder Kim Jong Un dijo que el uso de las aguas por parte de la nación como “nuestro campo de tiro” depende de la “acción” de las fuerzas estadounidenses.
“… Usar el Pacífico como nuestro campo de tiro depende del carácter de la acción de las fuerzas estadounidenses”, dijo Kim Yo Jong en un comunicado compartido por los medios de comunicación estatales de Corea del Norte.
Los nuevos lanzamientos se producen después de que Corea del Norte disparara el sábado un misil balístico intercontinental de largo alcance (ICBM) al océano frente a la costa de Japón, una medida que el Consejo de Seguridad Nacional de EE. UU. calificó como “una violación flagrante de múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU”.
Aunque Estados Unidos no evaluó una amenaza inminente, dijo que la medida de Corea del Norte “aumenta innecesariamente las tensiones y corre el riesgo de desestabilizar la situación de seguridad en la región”.
Corea del Norte disparó docenas de misiles el año pasado, y los últimos dos lanzamientos se producen cuando Corea del Norte parece enfadada por los ejercicios militares conjuntos de Estados Unidos y Corea del Sur, y por un vuelo de bombardero estadounidense que voló en respuesta al misil balístico intercontinental anterior.
Jong dijo en su declaración que Corea del Norte “examinará de cerca el estado de influencia” de las fuerzas estadounidenses activas en la península de Corea y prometió “tomar [s] contramedidas correspondientes si se considera que causa alguna preocupación”.
“No hay cambio en nuestra voluntad de hacer pagar caro a los fanáticos de primera clase que tensan la situación”, dijo la hermana del líder.
A raíz de los despidos, Japón solicitó una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU.
Associated Press contribuyó a este informe.